Con una notable actuación del apertura Daniel Carter, y un funcionamiento colectivo bastante superior, el plantel de los All Blacks neozelandeses alcanzó a conquistar hoy su octavo título del Tres Naciones, tras superar al seleccionado de Australia en Eden Park, por un resultado de 26 a 12.La tercera consagración consecutiva de los de Graham Henry - que incluyó además la obtención de la tradicional Copa Bledisloe - se produjo en un contexto muy diferente al último encuentro que ambos equipos habían disputado este año, con un desenlace favorable a los Wallabies por 20 - 15.En la definición llevada a cabo en Auckland, los locales prevalecieron sobre la base de un desgaste progresivo propulsado por la influencia de sus tres cuartos.Australia evidenció su oficio a la hora de cerrar los espacios, con un buen trabajo de forwards, pero el mayor dinamismo de su oponente le impidió evitar una seguidilla fatídica de infracciones, especialmente durante el transcurso de la primera mitad.En dicha instancia, el protagonismo de Carter fue absoluto. El número 10 anfitrión gestó con su patada el tenue parcial de 12 a 9, siempre a través de situaciones generadas por faltas australianas. Los Walalbies, por su parte, sumaron con dos penales Stirling Mortlock y un drop de Mat Gitteau.En el complemento, los primeros diez minutos entretuvieron al público con un nuevo show de disparos: dos penales de Carter (4' y 10') y un tercero del capitán Mortlock (8').Pero cuando todo parecía indicar que la final del certamen se limitaría a ese ida y vuelta con el kick, los All Blacks decidieron profundizar su presión sobre los últimos metros rivales, y desde la iniciativa de Brendon Leonard, consiguieron llegar al único try de la noche neozelandesa, gracias a una intervención final del primera línea Tony Woodcock.Con este resultado, Nueva Zelanda ratificó su condición de indiscutible líder del hemisferio sur, acumulando en total unos ocho títulos, sobre doce ediciones disputadas.
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